La ginebra se ha convertido en la bebida de moda. Ahora mismo, salgas por donde salgas, ves que todo el mundo se pide su gin tonic, lo que ha dado paso a un gran negocio. Algunos lo hacen incluso como homeopatía, ya que dicen que es digestivo. Supongo que será por las bayas de enebro, que es la base para hacer la ginebra , y que dicen que tienen propiedades medicinales para las enfermedades renales, estomacales e incluso dicen que es mano de santo para curar las gripes y resfriados. Pues bien, hoy nuestra receta tiene como protagonista a la ginebra.
Si no eres experta en ginebras, tranquila, ahora mismo en el mercado hay muchas marcas. Por supuesto no tienes que comprar la más cara, porque podrás comprobar cómo algunos se han subido a la parra. Para esta receta, con que compres la más básica te va a servir. Intenta que sea con cierto toque de secura, sin demasiados aromas florales. Una de esas que igual te combina con cardamomo que con pimienta rosa.
Ingredientes
- 200 gr de mantequilla
- 100 gr de miel
- 90 gr de azúcar
- 200 gr de harina
- 10 gr de impulsor
- Sal
- 4 huevos
- 50 ml de ginebra
- Especias
Ingredientes para la cobertura:
- 130 gr de azúcar lustre
- 15 ml de agua
- 15 ml de ginebra
- Ralladura de un limón
Elaboración
- Lo primero será derretir en un cazo, la mantequilla con la miel, el sirope y el azúcar a fuego medio. Cuando lo llevamos a ebullición, lo retiramos del fuego. Para posteriormente dejar templar unos 15 minutos.
- Tamizar la harina con el impulsor, las especias y la sal en un bol. Luego batir los huevos como si fuera para tortilla, así que habrá que darse maña, y añadir a la harina. Mezclar bien con movimientos envolventes para conseguir una masa homogénea. Sin dejar de batir añadir la mezcla de mantequilla y miel. Por último incorporar la ginebra. La masa queda un poco líquida y lo importante es que no queden grumos, que harán luego que no tenga la forma.
- Tendremos que hornear en horno precalentado a 165º unos 50 minutos aproximadamente. Y como no, hay que hacer la prueba del palillo para comprobar que está hecho. Retirar del horno, dejar templar 10 minutos en el molde, desmoldar y dejar enfriar completamente sobre una rejilla.
- Ahora vamos con la elaboración de la cobertura. Tenemos que añadir una cucharada de ginebra, una de agua y la ralladura de un limón al azúcar de lustre y mezclarlo. Debe quedar suficientemente espeso para que se pueda untar por encima del bizcocho. Para finalizar, extender el glaseado por el bizcocho cuando éste, esté completamente frío.
- Esta receta es perfecta para sorprender a tus amigos durante una comida. Es muy sana y además digestiva y con muchos beneficios. Eso sí, posteriormente no puede faltar el típico gin tonic. Sírvelo en copas especiales, no lo hagas en el típico vaso de tubo o normal. Las de Export Cave, son bastante económicas y tienen un tacto perfecto.
Espero que la receta de hoy os haya gustado. Y aunque tiene parte de alcohol, también se puede ofrecer, eso sí, un trozo más chico, para los más pequeños de casa. Buen provecho.