El tomate, uno de los alimentos más conocidos y populares de hoy en día, se considera que es una planta originaria de Perú y que llegó al viejo continente europeo a través de las manos de los conquistadores españoles de América. Sin embargo, lo que seguramente es menos conocido y pocos saben es que en sus inicios solamente fue utilizado como planta ornamental y no fue utilizado como planta alimenticia hasta finales del siglo XVIII.
El tomate, junto con la patata, la berenjena o el pimiento, pertenece a la familia de las solanáceas, aunque posiblemente de estas es el que más propiedades beneficiosas para nuestra salud presenta. Se presenta como una fruta-hortaliza, ya que su aporte de azúcares es superior al de otras hortalizas, lo que le da un ligero sabor dulce. Su aporte calórico es muy bajo, pues cuenta aproximadamente con 18 kcal por cada 100 gramos, correspondiendo la mayor parte de su peso a agua, y su aporte en fibra también es bajo, un 1,8%, pero las semillas, pulpa y piel son suficientes para favorecer el tránsito intestinal.
El tomate se consume tanto fresco, en ensaladas, como procesado, en forma de purés, salsas, deshidratado, concentrado, mermeladas, etc. y su elaboración en conservas permite que se encuentre disponible todo el año. Aquí, en este punto es donde entra en juego Hida, una empresa que nació en 1954 en Mula (Murcia) combinando la sabiduría de los preparados caseros con los mejores productos 100% naturales, frescos, sin conservantes ni aditivos, para conseguir los mejores sofritos de tomate de la huerta española, estando sus productos certificados en los sistemas de calidad y medioambiente, por lo que se convierten en uno de los básicos para nuestra alimentación del día a día.
Entre las propiedades nutritivas que presenta el tomate podemos destacar:
- Es una fuente muy interesante de vitaminas, entre las que destacan las del grupo A, básicamente en forma de carotenoides provitamina A, Vitamina B en especial la B1 y la B3 o cianina, pero sobre todo presenta un alto contenido de vitaminas C y E con un importante poder antioxidante. Se considera que una ración de tomate cubre el 61% de la necesidad diaria recomendada de vitamina C.
- Es rico en minerales como el potasio, magnesio, el hierro o el fósforo.
- Contiene licopeno, un pigmento carotenoide que le confiere su atractivo color rojo y que posee propiedades antioxidantes. Actúa protegiendo a las células humanas del estrés oxidativo, producido por la acción de los radicales libres. Dado que el licopeno no puede ser producido por nuestro organismo, la única forma de obtenerlo es consumiendo alimentos ricos en él como la sandía, los pomelos…, si bien el que mayor cantidad de licopenos concentra es el tomate. Estudios realizados demuestran que el tomate cocinado es la mejor forma de absorber el licopeno, porque se absorbe con el triple de eficacia, después de que el calor haya roto las membranas celulares y haya permitido su salida.
Pero además de las ptopiedades nutritivas que presenta, también existen otros beneficios del tomate en nuestra salud:
- Protege al organismo frente a enfermedades cardiovasculares, reduciendo el riesgo de infarto, ya que ayuda a controlar la frecuencia cardíaca y la tensión arterial.
- Reduce el colesterol, mejorando notablemente la flexibilidad de los vasos sanguíneos y evitando la formación de coágulos.
- Tiene un efecto anticancerígeno, sobre todo para cierto tipo de cánceres como el de próstata, riñón, estómago, pulmón, páncreas, intestino, etc.
- Buen regulador del tránsito intestinal, previniendo el estreñimiento y la diarrea, así como la ictericia.
- Protege la piel de los rayos ultravioletas, ayudando a la rápida cicatrización de heridas y alivio de quemaduras, manteniendo los dientes, huesos y pelo sanos. El tomate es un componente importante en el proceso de preparación de productos contra el envejecimiento de la piel, pues mejora la hidratación, la luminosidad, el tono y el brillo de la piel.
- Ayuda al cuerpo a desarrollar resistencia contra agentes infecciosos.
- Mejora la visión, previene la ceguera nocturna y la degeneración macular, por su alto contenido en vitamina A.
¿Dónde se encuentra también presente el licopeno?
El licopeno se encuentra presente en frutas y verduras de color rojo y naranja, por lo que además del tomate que es el que mayor cantidad concentra, se encuentra en otros alimentos como la sandía, la papaya, las fresas, grosellas, arándanos, cerezas, zanahorias, pimiento rojo, albaricoque, caquis, col roja, guayaba, pomelo rosado, granada, etc. Es por ello por lo que no tenemos excusa para consumirlo y es que está presente en una gran cantidad de alimentos.