La confitería y repostería tradicional y artesanal gana enteros en España

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Hay que decirlo: nos encanta todo lo que sea dulce. No pasa nada por reconocerlo. Es evidente que todo el mundo tiene alguna preferencia a la hora de comer algún producto de bollería o repostería y no podemos negar bajo ningún concepto el hecho de que nos encanta todo lo que tiene que ver con postres, desayunos y demás productos de este tipo. Durante muchos momentos decimos que queremos limitar el consumo de estos productos, pero eso es mucho más complicado hacerlo que decirlo. Y es que es muy difícil, por no decir imposible, que tengamos la capacidad de negarnos a probar un manjar como los que implica el consumo de algún producto de este estilo.

Estamos hablando de una serie de productos que llaman la atención a personas de todas las edades y características. Ni que decir tiene que los niños son los que más suelen valorar este tipo de productos, pero que las personas mayores y los adultos medios no son menos en este sentido. Por otra parte, no cabe la menor duda de que el sexo no es una característica que defina a las personas que consuman los alimentos de bollería o repostería. Tanto mujeres como hombres suelen disfrutar por igual del tipo de comida de la que estamos hablando.

Según un estudio que fue publicado por el portal web Statista, el consumo de productos relacionados con la bollería o pasteles en España en el año 2020 fue de 286.000 kilos. Otros productos, como las galletas o los cereales, tenían una cantidad que fue de 255.000 y 80.000 kilos, respectivamente. No cabe duda de que estamos hablando de productos que, sin duda, constituyen una parte fundamental de nuestra alimentación y que está claro que disponen de un arraigo con el que no cuentan muchos otros productos en el interior de nuestras fronteras.

En España somos unos verdaderos amantes de todo lo que tiene que ver con los dulces, la repostería o la pastelería. Prueba de ello es que, año a año, el consumo de este tipo de productos crece en todos los rincones de nuestra geografía. Desde la confitería San Joaquín nos han hecho saber, a través de una videoconferencia reciente, que las tartas y los helados siguen siendo los productos más demandados por parte de un público español que es goloso como pocos y que lo va a seguir siendo porque esta es parte de su naturaleza.

Productos ligados a la tradición y la artesanía

Los productos de los que estamos hablando vienen estando ligados, al menos en lo que respecta a los últimos años, a la tradición y la artesanía. Y esta es, sin lugar a dudas, una buena noticia que no podemos hacer más que celebrar. Este es, de hecho, uno de los motivos por los cuales el consumo de helados o de tartas está creciendo tanto en España, superando poco a poco a esos helados y tartas industriales que han copado el mercado durante algunos años pero que no tienen nada que ver en lo que respecta a su calidad y a su proceso de elaboración.

Está claro que el hecho de que la artesanía y la tradición se impongan hace que el producto sea de otra manera. Por lo general, podemos decir que estos productos son mucho más sabrosos y que ese es el motivo por el que hay tanta gente que ha empezado a consumirlos ahora o que los ingiere de manera más habitual que antes. No es para menos. Disfrutar de los buenos sabores es una de las maneras más placenteras de seguir apostando por tener una vida plena y en la que no nos privemos de nada.

Está claro que va a seguir habiendo una cantidad tremenda de personas que van a querer consumir productos como de los que estamos hablando. Y es que no cabe duda de que las personas, por muy diferentes que seamos y por muchas cosas que nos separen, siempre vamos a tener una especie de gusto por aquello que sea dulce. Y está claro que las tartas, los helados, los postres y un montón de tipos de alimentos más lo son.

Buena parte de todo aquello que nos hace disfrutar en la vida es lo que está relacionado con la comida. Y es verdad que hay que comer de todo para estar sanos y fuertes. Pero un capricho nunca está de más, sobre todo si luego sabemos compaginar eso con la práctica de deporte, por ejemplo. Animarse a probar dulces es algo que debemos hacer para sacar el máximo partido de cada momento de nuestra vida, es un placer irrechazable. Potenciar todo lo que tenga que ver con eso siempre será un acierto y no un error.

 

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