Hace unos años empezamos a oír hablar sobre la creación de nuevos sabores de helados muy originales: de fabada, de pistacho, de jamón ibérico e incluso de ajo (no seré yo quien pruebe eso) pero ahora estamos empezando a escuchar rumores sobre cierta repostería que se elabora con productos muy poco habituales.

Aunque en otras zonas del mundo, sobre todo en Asia, están más acostumbrados, aquí es muy extraño aún oír hablar de ciertos sabores en un postre, pero, poco a poco, van llegando hasta nosotros a modo de cuentagotas y algunos chefs van cogiendo ideas para elaborar nuevas creaciones.

Ejemplos

Mayocake, torta de mayonesa y chocolate. Se trata de una torta de harina, azúcar y cacao a la que se le añade una taza de mayonesa en lugar de mantequilla.

Crema pastelera de huevos de mosca: se utilizan los huevos de la mosca de la fruta en proceso de fermentación triturados lo que añade cierto toque de acidez a la crema.

Gusanos caramelizados: y también larvas con sabor a panceta o escorpiones bañados en chocolate. Y no, no es cosa de los chinos, esto son recetas de una empresa de California.

Chicles con gusto a albóndigas: otro invento estadounidense, una golosina que no deja indiferente a nadie.

Caramelos de esperma: no hace falta que os explique nada más ¿no?

Chocolate sabor bacon: ideal para el bocadillo de la tarde.

Chocolates de cada de bebé: Por lo visto no tienen sabor, pero sí la forma, y el envoltorio es como un pañal. Increible…

Pero lo más interesante, más que nada porque es la última apuesta gourmet en nuestro país y hay que tenerla en cuenta en nuestros negocios, son los bombones de caviar. La idea parte de un maestro chocolatero belga, a pesar de que parece haber entrado con buen pie en casi todos los países europeos. Se trata de Dominique Persoone, que ha abogado por combinar el amargo sabor del chocolate puro con un caviar de exquisito sabor.

Antes de nada he de puntualizar que si queremos preparar algo así no podemos comprar sucedáneo ni un caviar de baja calidad, optad por caviar de beluga o por caviar iraní. En Marine Food encontraréis todo lo que necesitáis.

Para crear estos bombones de chocolate y caviar, debéis dar con las mejores materias primas y mezclar ambos productos hasta conseguir crear un único chocolate capaz de ocasionar una explosión de sabor en la boda. Se puede añadir un toque de caramelo al bombón, lo que dará la nota dulce a la receta.

Otra opción es crear una envoltura perfecta de chocolate negro con cobertura de praliné y dejar en su interior un poco de caviar crujiente que rompa al dar el primer bocado al bombón.

Deben estar creados de la manera más tradicional posible. Si contáis con alta tecnología que os ayuda en la creación de vuestros dulces olvidaos de ella para crear estos pequeños bocados de manjar porque esa es la única manera de conservar todos los aromas y su potente sabor.

Antes de apuntaros al carro pensad en su coste y en si tenéis clientela que quiera llevarse estos bombones ya que hablamos de chocolate belga de primera calidad y de uno de los mejores caviares del mundo por lo que el coste de estos bombones no es precisamente económico.

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